miércoles, 17 de marzo de 2010

viernes, 12 de marzo de 2010

Delibes, buen Camino!

Delibes y Redecilla del Camino
Cuando hace diez años los quintos de Redecilla del Camino se pusieron en contacto con él, que acababa de salir de su operación de colón, para que dedicara su tiempo en homenaje a los maestros de Redecilla, Miguel Delibes no lo dudó ni un segundo. Se ofreció a todo, y es verdad que pudimos abusar de él y de su salud, pero no lo hicimos.


Queríamos que los maestros de Redecilla, que lo fueron por más de 40 años. Que nos enseñaron todo lo que sabían, y que habían sido maestros de nuestros padres, nuestros, y de nuestros hijos, tuvieran un reconocimiento humilde, y fuera de todo protocolo.

Lo sabemos, porque ellos nos los dijeron: ése sencillo homenaje les llenó el alma, y gratificó en su corazoncito tantos años dedicados a la educación: lo fueron todo en la educación redecillana.

Pues bien, Miguel Delibes les dedicó una edición facsímile de su obra El Camino.


50 años cumplíamos los quintos y 50 años cumplía su novela El Camino

El Camino narra los sentimientos y vivencias de tantos niños que en los años 50 y 60 nos tuvimos que abandonar nuestros pueblos por distintas circunstancias.

Y ahora que cumplimos 60 años,
que su obra cumple 60 años, ahora que se ha ido,
no podemos más que agradecérselo desde cualquiera de los púlpitos a los tenemos acceso

Gracias Miguel, tu obra es y será el testigo y el testamento de Castilla.

Buen Camino, Miguel.

Quintos del 50 de Redecilla del Camino

Acompañando a Delibes, Gracias Miguel

Miguel Delibes tuvo el detallazo de hacer un homenage a los maestros de Redecilla, Don Paco y Doña Angles.
Muchos libros del autor de Cinco horas con Mario (1966) y Los santos inocentes (1981) han sido adaptados al cine, la televisión o el teatro, como El camino (1963), de Ana Mariscal; La guerra de papá (1977), de Antonio Mercero; Los santos inocentes (1984), de Mario Camus; Una pareja perfecta (1997), de Francesc Betriu; o El disputado voto del señor Cayo (1986) y Las ratas (1998), películas ambas de Antonio Giménez Rico. Dentro de la escena queda el recuerdo de sus Cinco horas con Mario, monólogo a cargo de Lola Herrera, o Las guerras de nuestros antepasados.

Novelas
La sombra del ciprés es alargada: En esta su primera novela, con la que consiguió el Premio Nadal en su tercera edición, Delibes inaugura su carrera literaria con dos de las que luego serán sus constantes narrativas: la infancia y la muerte.
Aún es de día: Segunda novela de M. Delibes. Sebastián, hombre tarado y pobre, sufre las burlas y el desprecio de sus vecinos, e incluso el engaño de la chica de quien se ha enamorado y con la que sueña casarse. Él trata de superarlo con una intensa vida interior, pero la sórdida realidad se impone y puede más que su espiritualidad. La novela retrata con meticulosidad la vida de una ciudad de provincias de la inmediata posguerra española, es decir, de los años cuarenta del pasado siglo.

El camino: Tercera novela de M. Delibes, y en la que, según propia confesión, encuentra su voz y estilo narrativos. La infancia vuelve a ser protagonista en este tercer relato delibeano.
Un facsimil de esta obra les fue dedicada por Miguel Delibes a los Maestros de Redecilla hace ahora 10 años

Mi idolatrado hijo Sisí: Novela muy ambiciosa, tanto en el contenido como en la forma. Dividida en tres libros, que recrean tres épocas sucesivas de la reciente historia de España: 1917-1920; 1925-1929 y 1935-1938, cuenta la vida y andanzas de Cecilio Rubes, comerciante en una capital de provincia, católico de apariencias y de mentalidad típicamente burguesa, cuyo egoísmo le lleva a conformarse con un único hijo, a quien mima y tolera, y a quien la guerra civil española le arrebatará brutalmente.

Diario de un cazador: Miguel Delibes ha dicho que Lorenzo, protagonista de esta novela, es el personaje más optimista y desenfadado que ha salido de su pluma. Bedel de instituto y cazador, Lorenzo anota en su diario, con un lenguaje expresionista y lleno de matices y resonancias populares, no sólo sus andanzas cinegéticas, sino también aquellos trances que configuran su modesta existencia junto a su madre viuda y a su novia Anita, con la que acabará -aunque no en esta novela- casándose. Por este libro obtuvo Delibes el Premio Nacional de Literatura.

Diario de un emigrante: La novela la escribió Delibes, según propia confesión, a raíz de una estancia en Santiago de Chile, en 1955, en cuyo viaje de ida fue leyendo su "Diario de un cazador", recién salido de la imprenta. Asombra en este relato la capacidad del novelista castellano para hacer suyo el modo de hablar de Chile, cuyo variopinto vocabulario incorpora progresivamente Lorenzo a su ya peculiar manera de expresarse.

La hoja roja: Un desolador relato en torno a la vejez, la soledad y el desamparo, aunque matizado, como siempre, con la ternura, el comedido lirismo y el humor balsámico que Delibes imprime a sus más patéticas historias.

Las ratas: Coartado en su libertad de expresión a la hora de denunciar la postración del medio rural castellano desde el periódico que dirigía, El Norte de Castilla, Delibes le busca las vueltas a la censura y escribe su novela Las ratas, una visión descarnada y trágica de la tierra y las gentes de la Castilla de mediados del siglo pasado.

Cinco horas con Mario: La fórmula de monólogo interior adoptada por el novelista, respondió a exigencias de la censura reinante en la época, pues de haber presentado a Mario vivo, defendiendo la tesis que su viuda le echa en cara, la novela no hubiera obtenido el beneplácito de los censores.

Parábola del náufrago: Como si se tratara de la transcripción puntual de una pesadilla, Delibes narra la vida, "naufragio" y aborregamiento final de Jacinto San José.

El príncipe destronado: La novela no es otra cosa que el relato minucioso -hora por hora- de un día cualquiera en la vida cotidiana de Quico y su familia. Pero la novela es al mismo tiempo un fresco de las relaciones y conflictos familiares, y en particular del padre y de la madre, que viven la postguerra española -época en la que se sitúa el relato- desde puntos de vista absolutamente dispares: la de los vencedores y vencidos, en definitiva.

Las guerras de nuestros antepasados: Novela en forma dialogada, en la que el recluso Pacífico Pérez, condenado por homicidio, desvela al médico de la prisión su vida y sus sentimientos. Y a lo largo del entrecortado relato de este joven pueblerino, de insobornable candor y de una casi enfermiza sensibilidad, va el lector tomando conciencia de un país y de una sociedad, violenta y enfrentada, que no puede, generación tras generación, vivir sin una guerra que librar.

El disputado voto del señor Cayo: La novela es una constatación y una sátira de la antítesis entre estas dos concepciones de la vida e incluso de la historia en la que, sin embargo, y una vez más, la melancolía y la ternura de Delibes humanizan la desaparición del mundo simbolizado por el señor Cayo.

Los santos inocentes: Dividida en seis libros, como otros tantos cantos épicos, esta historia trágica y lírica al mismo tiempo nos narra la dramática existencia de unos seres marginados, habitantes de un cortijo extremeño, cuyo sometimiento al amo marca y determina su miserable vida cotidiana.

Cartas de amor de un sexagenario: Un jubilado sexagenario encuentra un día, en una revista de la sala de espera de un médico, el anuncio de una viuda de 56 años que pide cartearse "con caballeros de hasta 65 y de similares características" a las que de sí misma expone. Eugenio Sanz Vecilla hace suya la propuesta y comienza una correspondencia entre ambos, si bien la novela sólo recoge las cartas del protagonista.

El tesoro: Una nueva novela del encuentro -por no decir "encontronazo"- entre el campo y la ciudad. Y trocando, además, el tópico binomio de la bondad de la aldea frente a la malicia de la corte.

Madera de héroe: a novela contiene una notable carga autobiográfica y puede considerarse, además, como una de las más ambiciosas y cuajadas del escritor castellano.

Señora de rojo sobre fondo gris: Con fuerte carga autobiográfica -Delibes rinde un homenaje a su esposa, muerta en parecidas circunstancias en 1974- la novela es una intensa historia de amor en desenfrenada carrera hacia la muerte, así como el retrato de una mujer convertida en personaje, con una personalidad humana fuera de lo común.

Diario de un jubilado: Miguel Delibes siempre había querido hacer de Lorenzo una especie de alter ego literario que fuera practicando los deportes que él practicaba y envejeciendo con él. Sin embargo, requerido por otros temas y personajes, dejó pasar cuatro décadas sin volver sobre el vitalista y deslenguado cazador que, en palabras del propio novelista, es su personaje más optimista.

El hereje: Dedicada a "Valladolid, mi ciudad", la por ahora última novela publicada por M. Delibes, es, en sus propias palabras, la más "ambiciosa y compleja" de cuantas ha escrito.

Novela corta
El loco: Se trata de una novela epistolar, en la que el narrador, un anodino empleado de banca, cuenta a su hermano la obsesión que le embarga tras haber conocido casualmente a un hombre del que sospecha estar ligado al pasado de la familia y relacionado, incluso, con la muerte violenta de su padre.
Los raíles: Un humor cáustico, no exento de misericordia, por los protagonistas impregna esta historia, en la que destaca la irónica parodia de las desventuras de un eterno opositor. Los raíles se publicó primero en La novela del sábado (1954), formando luego parte del libro de relatos Siestas con viento sur (1957).
La mortaja: Es sin duda uno de los relatos más intensos y dramáticos de Miguel Delibes, y en el que se dan cita, de manera palmaria, las cuatro constantes de su narrativa: Infancia, muerte, naturaleza y prójimo.

Cuentos
La partida: Es el primer libro de cuentos publicado por Miguel Delibes, y en el que se recogen diez relatos, cuyo argumento, por lo general, se basa en experiencias del propio escritor o en situaciones muy cercanas a él.
Siestas con viento sur: Son cuatro narraciones o novelas breves, dos de ellas de ambiente urbano, El loco y Los raíles; y las otras dos de tema y ambiente rural, La mortaja y Los nogales.
La mortaja: Es sin duda uno de los relatos más intensos y dramáticos de Miguel Delibes, y en el que se dan cita, de manera palmaria, las cuatro constantes de su narrativa: Infancia, muerte, naturaleza y prójimo.

Libros de viajes
Por esos mundos: Sudamérica con escala en Canarias: Aun cuando en 1956 había publicado M. Delibes Un novelista descubre América, podemos considerar este libro que nos ocupa como el primero de la serie de crónicas viajeras que salpican su bibliografía. Se olvidó luego Delibes, al parecer, de su propósito, y nunca más volvió a titular ninguno de sus otros cuatro libros de viajes con el anunciado y genérico Por esos mundos.

Europa: parada y fonda: Nada mejor que las palabras del propio escritor para definir el libro: "En 'Europa: parada y fonda' el viajero no ha hecho otra cosa que recoger a su aire media docena de impresiones sobre cuatro países europeos -Italia, Portugal, Alemania y Francia- visitados a lo largo de los últimos años".

Usa y yo: Consta el libro de 33 crónicas o capítulos, que recogen las experiencias del novelista a lo largo de los seis meses que pasó en la Universidad de Maryland, como Profesor Visitante del Departamento de Lenguas y Literaturas Extranjeras, en 1964.

La primavera de Praga: El libro narra, de forma dialogada con un supuesto interlocutor, la visita que le novelista hizo a Checoslovaquia en la primavera de 1968, justo unos meses antes de producirse la intervención soviética, el 21 de agosto de ese mismo año.

Dos viajes en automóvil: Suecia y los Países Bajos: El sexto y último de los libros viajeros publicado por M. Delibes consta de dos partes: Seis crónicas relacionadas con Suecia, y fechada su escritura en Sedano, en 1980; y el "Diario de un viaje por los Países Bajos", con 14 anotaciones que van del 24 de marzo de 1981 al 5 de abril del mismo año.

Libros de caza y pesca
Con la escopeta al hombro: Un día de caza no es tanto llenar el morral, cuanto llenar los sentidos y el espíritu de naturaleza.

Aventuras, venturas y desventuras de un cazador a rabo: Delibes sale al campo escopeta en ristre y apunta luego, en su cuaderno de caza, los lances de la jornada.

Mis amigas las truchas: El libro lleva por subtítulo "Del block de notas de un pescador de ribera", y se trata, en efecto, de un nuevo diario, esta vez de pesca, correspondiente a las temporadas que van de 1972 a 1976.

La caza de la perdiz roja: Se trata de un breve y delicioso texto, publicado primero independiente, con fotografías de Oriol Maspons (1963); e incorporado luego a la edición de "Viejas historias de Castilla la Vieja", de 1969.

Libros autobiográficos
Un año de mi vida: Delibes fue constatando y comentando todo aquello que le iba sugiriendo la realidad cotidiana. Comenzó su diario el 22 de junio de 1970 y lo cerró el 20 de junio de 1971.

Mi vida al aire libre: Lleva el libro como subtítulo "Memorias deportivas de un hombre sedentario" y en ellas rememora Delibes los diferentes deportes que ha practicado a lo largo de su vida.

Libros sobre Castilla
Viejas historias de Castilla la Vieja: Ironía y ternura, soterrada denuncia y profunda simpatía se conjugan en estas estampas, narradas con un estilo limpio y preciso, desde un cabal conocimiento del medio rural castellano, tanto en lo geográfico como en lo humano. Miguel Delibes siempre ha considerado éste como uno de sus libros preferidos.

Castilla habla: Son 32 coloquios con otros tantos oficiantes de viejos oficios del medio rural castellano en trance de desaparecer. Son los protagonistas quienes hablan con su propia voz y timbre y es Castilla, por ende, quien habla por sus bocas.

Castilla, lo castellano y los castellanos: Se trata de una selección, llevada a cabo por el propio Delibes, de los textos más representativos sobre la tierra y las gentes de su Castilla natal.

Libros para niños
Tres pájaros de cuenta: Único libro escrito por Delibes pensando en lectores infantiles.
Mi mundo y el mundo: El libro lleva por subtítulo "Antología de obras del autor, para niños de 11 a 14 años", y se trata, en efecto, de una selección del propio escritor "de aquello -son sus palabras- que más pudiera interesarles".

Misceláneos
Vivir al día: Es éste el primer libro recopilatorio -o misceláneo- de los publicados por M. Delibes, y en él recoge el escritor textos, artículos de prensa sobre todo, publicados en diversos periódicos españoles, sobre todo en el El Norte de Castilla, a lo largo de quince años, exactamente desde 1953 a 1967.

El mundo que agoniza: Se trata del texto del discurso de ingreso de Miguel Delibes en la Academia de la Lengua, en 1975, reorganizado en capítulos y prologado por Ramón García Domínguez.

El otro fútbol: Recopilación de quince artículos de prensa sobre los más variados temas, pero cuyos tres primeros de la serie, los más extensos, hablan de asuntos futbolísticos tales como el superprofesionalismo de los jugadores o la moderna táctica del cerrojo a la que Delibes bautiza, precisamente, como "el otro fútbol" o el antifútbol.

La censura de prensa en los años 40 y otros ensayos: El primero y más extenso de los diez ensayos recopilados en este libro recoge la experiencia de Miguel Delibes como periodista en El Norte de Castilla durante la primera época de la dictadura del general Franco.

He dicho: El libro se cierra con el "He dicho" con que Delibes culminara su discurso de recepción del Premio Cervantes, en abril de 1994, cuyo texto, además, es el último de los recopilados en el volumen.

martes, 9 de marzo de 2010

Elaboración del pan en el horno comunitario

Título: Elaboración del pan en el horno comunitario
Localidad: Santa Cruz del Valle Urbión

Intérpretes: Mujeres del pueblo

Lugar y fecha de grabación: Santa Cruz del Valle Urbión, año 1993.

Incorporación al archivo: Cesión temporal del recopilador y de los productores del vídeo.

Nota: En el medio rural riojano ha sido muy habitual la elaboración propia del pan, bien en los hornos familiares o bien en un solo horno comunitario. El horno comunitario venía muy a propósito en aquellos pueblos en los que hombres y mujeres salían a trabajar en fincas lejanas o a otras localidades. En estos casos, unas pocas mujeres se encargaban de amasar el pan y cocerlo para todo el pueblo. La mujer ha sido generalmente, y antes de que aparecieran las panaderías, la encargada de hacer el pan. En sus manos, tanto la operación de amasar como la de preparar la hornada se convertían en un ritual religioso, en el que no faltaban variadas oraciones del tipo: Dios te crezca, Dios te aunezca...

Los turnos para hacer uso del horno se resolvían a veces echando a suertes, como en el caso de Valdeperillo donde usaban el viejo método de echar habas. No era infrecuente el uso de un sello familiar o espoleta que se marcaba en cada pan para no confundirse en el reparto.

Las mujeres de Santa Cruz del Valle, en La Riojilla, sorprendentemente mantienen esta costumbre, que desapareció hace muchos años en la mayoría de los pueblos. En Villarroya han recuperado el horno comunal y creado en él un ecomuseo, en el que cuecen el pan a la antigua usanza con ocasión de alguna fiesta.

Datos del vídeo:

Productor: Asociación de amigos de Belorado

Guión y dirección: Rufino Gómez Villar.

Coordinación y montaje: Fermín Baldazo González, Enrique Sánchez Ausucua, Luis José Presa Abella y Foto y Vídeo Julián.

Bibliografía:

Joaquín Miró Miranda. El pan en La Rioja. Elaboración y tradiciones. Edición de Jaime Libros y Caja de Ahorros de La Rioja. Barcelona. 1985.

Carlos Ezquerro Palacios. "La recuperación del horno comunal de Villarroya (La Rioja)" en Revista de Folklore, número: 203. Caja España. Valladolid. 1997. Tomo: 17b. Páginas 172-177.

http://www.funjdiaz.net/folklore/07ficha.cfm?id=1634

M.T. Sánchez Trujillano y J.R. Gómez Martínez. Trigo harina y pan. Logroño. Museo de La Rioja. 1994.
En Redecilla del Camino hubo tres hornos de leña hasta finales de los años 50 del s. XX. Aunque  no era comunitarios, sin embaro sí abiertos al público, pero era de propiedad privada.
Allí igual que en Sta. Cruz del Valle Urbión las mujeres  llevaban las masas para la "cochura" de pan de la semana o a veces, incluso, de la quincena.
Los tres fueron: el de Valeriano/Justino, el de Chencho/Basi y de Navarro que aún pervive.. 
Tomado de la web Rioja Archivo. No os perdáis este vídeo



Para ti mujer, escribo. 8 Marzo día de la Mujer.

Para ti mujer, escribo


Margarita Carrete de Tafur
Victoria Serna y  Purificación Arias
www.pueblos.espana.org

Escribo para ti mujer,
mujer de mil ropajes,
mujer joven o vieja
de esta dura tierra.

Escribo para ti
sin saber cómo eres,
hoy hablo para decirte
que no aceptes la suerte

¡Escúchame ahora!
Obrera de los tiempos
si hoy borras tu sonrisa
a cambio de tristeza,
no hay vida mala o buena
ni infiernos tan temidos
ni paraísos soñados,
la vida es una sola,
la vida se conjuga
de dolor y alegría,
la vida mujer hay que amasarla,
¡con nuestras propias manos!

¡Basta ya mujer!
de dolores callados,
despierta, anda y ve
que hay tiempos no sembrados

¡Basta ya mujer!
Arroja tu alma esclava
de los prejuicios vanos.

¡Mira el sol cómo brilla,
no te tapes los ojos
al resplandor del día!



Mujer del siglo XX
que luchas, trabajas y amas,
descubre y aprovecha los caminos,
recoge las mañanas,
entierra los silencios,
desátate las manos,
rompe ya esas cadenas
que la vida es empinada
y a fuerza de subirla
se hace mejor vida.

domingo, 7 de marzo de 2010

Redecilla y Turismo Castilla y León


Información turística sobre Redecilla del Camino
Turismo de Castilla y León
.- El Camino de Santiago.

viernes, 5 de marzo de 2010

Esto solo lo arreglamos entre todos

Qué queremos » Esto solo lo arreglamos entre todos

Queremos arreglar esto, y no vamos a esperar a que nadie lo haga por nosotros. Porque si no lo arreglamos nosotros, ¿quién lo va a hacer?

Llevamos demasiado tiempo viendo en todas partes lo mal que está todo. Es casi lo único que nos cuentan.

Pero la crisis no solo está ahí fuera, también está en nuestras cabezas. Nos ha hecho perder la confianza, nos ha contagiado el pesimismo, el desánimo.

Esto es lo primero que debemos arreglar, queremos recuperar la confianza.

Tenemos motivos para animarnos. En esta web encontrarás muchos.

Historias de gente como tú y como yo, que se han enfrentado al momento, que demuestran que con ilusión, entrega y compromiso se puede conseguir todo.

Gente que cree en sí misma y lo demuestra a diario desafiando la crisis.

Por ejemplo, ¿sabías que cada mes se crean cinco mil empresas en este país? ¿No te parecen cinco mil poderosas razones para creer?


Queremos que conozcas esas historias, que te inspiren, que te animes, que las compartas, que formen parte de las conversaciones y que consigamos que acaben llegando a los medios de comunicación, a los telediarios, a los editoriales, entre las noticias de lo malo y lo peor.


Tenemos que contagiar la confianza de la misma manera que se ha contagiado el pesimismo.

Porque cuando tú, y tú, y tú, y yo, nos convertimos en nosotros, no hay nada que no podamos arreglar

jueves, 4 de marzo de 2010

de Redecilla a Villambistia, de cabeza a la fuente

Tú, peregrino, si quieres llegar a Santiago en perfectas condiciones, tienes que meter la cabeza en la fuente de Villambistia. Lo dice la tradición y también unos papeles que guarda como oro en paño Rosa María García, en su casa al lado del Camino. Sí, bueno, su casa, aunque en realidad es la del abuelo de su marido, Adolfo Manso. 'Casa del Che' se llama. Lo decía un cartel colgado a la puerta y que ahora está de baja debido a las heridas que le causó el viento del pasado fin de semana. "Me lo arrancó de cuajo", explica Adolfo con el cartel en la mano. Promete colocarlo pronto, para que lo vea el próximo peregrino que pase por aquí... y por la fuente de la localidad.
¡A ver esa tradición! Pues cuenta la leyenda que hace muuuuchos años, en un verano en el que el sol derretía hasta las ampollas de los caminantes (mama tranquila, que a mí me están perdonando, y cruzo los dedos de los pies para que siga así). Decía que hace muuuuuchos años llegó hasta Villambistia un peregrino que venía desde Redecilla del Camino con la lengua fuera. Cansado es poco. Sofocado es menos. Estaba destrozadito el pobre. Y un vecino de lugar le dijo que lo mejor para refrescarse era meter la cabeza entera en la fuente. El peregrino no se lo pensó dos veces y hundió la testa en el agua. ¡Splashhh! Hasta el cuello. Y oye, mano de santo. El caminante llegó a Santiago. Comentó la jugada a otros viajeros compostelanos y, desde entonces, cuentan en Villambistia, la fuente del pueblo ha servido de amuleto para todos aquellos que al pasar por aquí decidieron mojarse en la fuente. Tentado estoy de zambullirme, pero ¡brrrr!, hace tanto frío...
Rosa María y Adolfo (simpáticos es poco) me eximen, así que me doy por mojado.
Los dos son enamorados de su pueblo. El natal de Adolfo. El de adopción de Rosa María. La pareja vive en Burgos, como la mayoría, pero en cuanto pueden se escapan hasta esta esquinita del Camino de Santiago. «Venir aquí es una gozada. Puedes hacer un montón de cosas». Excursiones por el campo, senderismo, hay fiestas casi todos los sábados y, dicen, se lía parda en las fiestas de agosto. Por la zona se pueden ver culebras, jabalíes, zorros y corzos. «Viene mucha gente a cazar, es una pena», se lamenta Rosa María, una de las 200 socias de la asociación cultural y recreativa de la localidad. Y eso que el pueblo sólo tiene 82 vecinos empadronados. En realidad, durante el invierno aquí sólo viven 13, tal y como reconoce Inmaculada, la hospitalera del albergue San Roque, que llegó a la localidad hace unos meses para que no se quedara sola la docena. Sólo unos meses, pero ya se sabe, cómo no, la historia de una de las fuentes más famosas del Camino.
El Norte de Castilla 4/03/2010

martes, 2 de marzo de 2010

Concepción Castro, Viloria de Rioja

La Biografa de Domingo de Viloria de Rioja nos cuenta la historia de Santo Domingo de la Calzada en verso...
La veterana de Viloria tiene el salero de narrarnos la biografía del Santo.

Ha fallecido Isabel García Manero, descansa en paz.

 El día 19 de noviembre ha fallecido Isabel García Manero, nacida en Cerezo de Riotirón hace 89 años,  se casó con el difunto Teófilo (Filo)...