Este año que una importante novedad, ya que en las ediciones anteriores se alternaba la salida entre Briviescay Cerezo, con alto en Carraquinea (vía romana apta para carros) para almorzar. Este año hemos salido desde las tres localidades y una vez realizado el encuentro en Carraquinea hemos ido todos ¿juntos? hastaQuintanilla San García, donde se nos ha recibido con un pasacalles por el pueblo y una buena comida.
Así que a las 9 de la mañana salíamos después de hacernos la foto de rigor en la Plaza Mayor de Briviesca el grupo de los romanos (solo había dos en la foto).
Enfilando por la Calle Mayor para incorporarnos a la Vía Romana de Italia a Hispania. En ésto que me para una persona para felicitarme por el reportaje del Guernika versus Castrillo y contarme algunas cosillas, así que para cuando retomé la marcha, estaba mas solo que la una.
Menos mal que entre los miliarios y las señales, es prácticamente imposible perderse, además pude disfrutar del entorno con una tranquilidad pasmosa, siendo mis compañeras de cantos y silbidos las alondras y las perdices.
Disfruté de los "sembraos" en los vallejos entre loma y loma. Estaba el campo pletórico.
Pero no todo era trigo y cebada, también había amapolas blancas. Supongo que ésto no viene de la época de los romanos, pero vete tu a saber si no lo tenían en el camino para alguna necesidad.
Bifurcaciones en las que había que estar atento para no tomar el camino equivocado. Señal a la izquierda de la vía y miliario al fondo a la derecha.
Como me gustan estos vallejos.
De nuevo una señal con claras marcas de que es utilizada como posadero por alguna ave.
Llegados a este punto en el que hay una pequeña área de descanso, di alcance a este par de rezagados, aunque al ir entretenido haciendo fotos y disfrutando del entorno, se me volvieron a "escapar".
Un pequeño puente de reciente construcción facilita el paso del arroyo, junto a los restos del antiguo puente.
Después de los años, la Calzada Romana ha ido desapareciendo de algunos lugares, ha pasado a ser finca de cereal, así que hay que seguir el camino por donde se puede. Yo me limité a "seguir la huella" dejada por los que iban delante.
Llegados a este punto se puede ver como era la antigua vía romana en un corte en la tierra.
Y cuando llego al lugar de encuentro, veo que a la vez vienen los procedentes de Cerezo de Río Tirón...
...donde nos encontramos autrigones y romanos.
Allí me encuentro con el amigo Zález que le pille "infraganti" grabando uno de esos estupendos reportajes que él hace.
El taquimetro era el instrumento que utilizaban para tomar las medidas a la hora de hacer las "carreteras" de la época.
Los que no se han cansado de esperar al encuentro de todos, vienen de escuchar las explicaciones de Isaac Moreno Gallo, un verdadero erudito en temas de vías romanas y uno de los impulsores de esta recuperación.
Los autrigones posando en una recreación de la calzada romana.
Un buen trago de la bota de vino ayuda a continuar con el camino.
La charla entre los romanos y los "paisanos" es habitual en estos menesteres...
...al igual que un buen aperitivo, antes de proseguir.
En esta recreación vemos las distintas capas de piedra que colocaban para asentar la calzada.
Un autrigón caminando solo.
Acercandonos peligrosamente se ve la iglesia de Nuestra Señora de Aliende.
Y allí nos esperan los romanos, dispuestos a conquistar las tierras de los autrigones, habitantes naturales de la zona.
Amenizados por los dulzaineros de la Ribera...
...bueno, no todos, que Pepe es de Briviesca.
Habían preparado unas carpas para albergar a las cerca de 250 personas de las tres localidades...
...y unas patatas con chorizo y costilla nos esperaba para recomponer el cuerpo y el espíritu.
Que buenas estaban. Mis felicitaciones a las personas que lo cocinaron y en definitiva a la organización.
Después del postre y el café, hubo la entrega de premios del I Concurso de relato corto Andrés Gutiérrez de Cerezo y un sorteo de regalos entre los asistentes ( a mi no me tocó nada), para subir a continuación a la iglesia de Nuestra Señora de Aliende y realizar una visita guiada.
El altar mayor visto a ras de suelo...
...y desde el coro.
La custodia que estaba preparada para procesionar al día siguiente celebración del Corpus .
También hay una imagen de Santiago Peregrino; existiendo en su día un hospital de peregrinos.
Y la joya de la corona, una virgen tallada en madera, que está bastante deteriorada.
Una vez visitada la iglesia, solo nos quedaba regresar a Briviesca, pero esta vez en autobús.
Te dejo un vídeo que he encontrado en YouTube sobre la edición del año pasado, realizado por rtvcyl y en el que habla el alcalde de Quintanilla San García.
Y con ésto y un bizcocho... hasta el año que viene en el segundo sábado del mes de Junio.
.jpg)
